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5 consejos para reparar un pinchazo
Los pinchazos en los neumáticos son una de las averías más comunes y conviene arreglarlos en un taller profesional, entre otras cosas, porque es una de las reparaciones más baratas.
Si has sufrido un pinchazo en tu coche, ninguno de los cinco consejos para poder repararlo fácilmente sustituye al primero y más importante. Un agujero en una rueda, solo quedará bien arreglado si el coche pasa por un taller especializado en neumáticos. Encima hay suerte, es de las operaciones más baratas.
1. Aunque repares la rueda en carretera, debes pasar por un taller
En First Stop, arreglar un pinchazo en un neumático cuesta 17,75 euros, y nunca te debe salir más caro de 22 euros. Eso sí, hay veces que un neumático no se puede arreglar. Por ejemplo, cuando el agujero está en uno de los hombros o en la pared lateral o cuando, en lugar de esto, hay una raja en la banda de rodadura.
Así, el primer consejo es que una vez arreglado el pinchazo del neumático en carretera, es conveniente acudir a un taller para certificar que la rueda está en buenas condiciones o que la reparen allí.
2. No intentes reparar una rueda en carretera
Dicho esto, el segundo consejo para reparar un pinchazo es de seguridad. Es aconsejable evitar las paradas en la vía por el riesgo de accidente que representan. De esta manera, cuando exista, siempre es aconsejable aplicar en carretera la solución de emergencia de la que disponga el coche: rueda de repuesto, galleta o kit de reparación.
Reparar un pinchazo no es difícil, pero sí puede ser peligroso hacerlo en la vía. Es por esto que algunos fabricantes de neumáticos, como Bridgestone, han desarrollado la tecnología de los neumáticos run flat.
Dotados de un compuesto que sella las fugas en el interior y de una pared semirrígida que mantiene la separación entre la banda de rodadura y la llanta; en caso de pinchazo del neumático, pueden seguir rodando durante bastantes kilómetros a una velocidad de hasta 80 km/h.
3. Poner la rueda de repuesto o de galleta
Así, en muchos coches modernos, no existen ruedas de repuesto convencionales. Es importante tener en cuenta que, si sufres un pinchazo en un neumático mientras conduces un SUV y tienes una complexión pequeña, es posible que no puedas manipular la rueda de repuesto sin ayuda.
Cambiar una rueda es sencillo, pero puede requerir de un poco de fuerza. Fundamental: antes de empezar la reparación, hay que llevar el coche a un lugar apartado del tráfico siempre que sea posible, colocar los triángulos y encender las luces de emergencia.
Las ruedas de repuesto de tamaño pequeño (de galleta) son fáciles de levantar, pero no podrás superar los 80 km/h mientras la estés utilizando. Es fundamental controlar periódicamente la presión de la rueda de galleta o la de emergencia, lo mismo que debes hacer con las que lleva montadas el coche.
4. Lleva siempre un equipo de emergencia en el coche para reparar pinchazos
El cuarto consejo: tener siempre un equipo de emergencia en el coche. En él, además de un botiquín, agua, guantes, linterna, chaleco reflectante y herramientas básicas, siempre debe haber un kit de reparación de pinchazos.
La tecnología no ha dado para más que dos de estos últimos y ninguno, que se sepa, ofrece una solución duradera. Lo más habitual, porque viene de serie en muchos modelos, es disponer de una espuma selladora de pinchazos y de un compresor con el que poder aplicarla y volver a dar presión al neumático.
Eso sí, por muy sellante que sea un producto, casi seguro que no va a cerrar el agujero completamente, y esto irá a peor cuanto más grande sea. Así, antes de aplicar la espuma, hay que localizar el pinchazo en el neumático. Si el clavo o el elemento que sea está muy metido, quizá no interese quitarlo y se aplicaría el producto para ir inmediatamente a un taller a reparar la rueda.
5. Los kit tradicionales de reparación, solo para manitas
Hay otro sistema con el que, si eres lo suficientemente manitas, puedes llegar a reparar el pinchazo de un neumático de forma más duradera. Se trata de los kit que incluyen un cargol o moco de goma. Tras sacar con unos alicates el objeto que lo haya producido, con un punzón se inserta en cargol dentro del agujero de manera que quede lo más sellado posible.
Tanto utilizas un moco o un cargol para cerrar el pinchazo del neumático, como si lo has rellenado de espuma sellante, al cabo de unos metros rodando con el coche tras la reparación, conviene parar y revisar la rueda por si está empezando a perder aire de nuevo rápidamente.
Si los cinco consejos para reparar un pinchazo en un neumático te parecen demasiado lío siempre tienes la grúa. Con cualquier seguro dispones de tres asistencias en carretera gratuitas al año. No tardará mucho en llegar, te llevará hasta un taller y allí la solución será rápida, permanente y, normalmente, barata.
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